Preocupación por descontrol en el sistema de transporte masivo Transcaribe
Por: Federico Archbold Botett
Lo que está sucediendo dentro y fuera de las estaciones del sistema, situaciones que hasta hace menos de un mes, no eran imaginables para nadie, vienen generando una honda preocupación en los usuarios que a diario necesitan utilizarlo.
Sobrecupos en los buses, ventas ambulantes tanto de ciudadanos extranjeros como colombianos, hurtos mediante la modalidad del cosquilleo y ahora hasta riñas dentro de las estaciones, hacen parte de la nueva realidad que vive Transcaribe, ante la gratuidad ordenada por la administración del sistema.
Y lo más grave es que pareciera que desde el mismo distrito no se estén aplicando los controles para prevenir este tipo de situaciones, que, de una u otra manera, lo único que están logrando es alejar a los usuarios, quienes hoy no sienten las garantías para abordar un vehículo del sistema sin encontrarse con alguna de las sorpresas que se vienen registrando a diario.
Llama la atención que las gestiones y reuniones que se han venido adelantando desde el distrito con el alto gobierno, consorcios operadores del sistema, sociedad civil y hasta el concejo distrital, no han tenido en cuenta a un actor fundamental y es el prestador del sistema de software y recaudo Colcard. Situación que genera dudas y nuevos interrogantes.
La decisión de la gratuidad en el sistema, que para algunos será una ventaja al tener un ahorro en su economía, está causando un descenso en los ingresos de los prestadores del servicio público de pasajeros o las llamadas busetas y hasta en los llamados mototaxis, quienes viene reportando que el número de usuarios transportados han descendido en un 70%.
“De continuar la gratuidad, estamos dispuesto a movilizarnos y si toca se hará un bloqueo de vías, por que la decisión de la alcaldía con el Transcaribe gratis afecta a más de 3 mil familias que viven de este tipo de transporte”, señala un conductor de la ruta directo de Cootransurb.
Este es el panorama que registra hoy Cartagena con su transporte público y lo más preocupante, es que no se plantea en el inmediato plazo una solución que ayude a la normalización del servicio que utilizan a diario miles de cartageneros.