Mejorar confiablidad del sistema de acueducto y disminuir su vulnerabilidad, objetivos de Aguas de Cartagena

La empresa de servicios públicos emprendió un plan de acciones operativas para mejorar la confiabilidad del sistema de acueducto y disminuir su vulnerabilidad. La estrategia proyecta una inversión global por $50.000 millones de pesos, de los cuales $11.000 millones corresponden a una “inyección” financiera establecida para este 2024.
“Con estos recursos se realizarán diversas obras y actividades técnicas que permitan un sistema de acueducto más resiliente y con menos impacto de afectación entre sus usuarios”, explicó el gerente de Acuacar, Manuel Vicente Barrera Medina, en diálogo con distintos medios de comunicación de la ciudad.
Durante el encuentro, Barrera Medina, reveló que dos de estas importantes obras que se pondrán en servicio en el segundo semestre del 2024 son las interconexiones de las tuberías existentes en los barrios Nuevo Bosque y El Campestre con las dos líneas de conducción de agua cruda que transportan caudal desde la Estación de Bombeo Albornoz hasta la Planta de Potabilización El Bosque. “Buscamos aislar el tramo afectado en caso de alguna contingencia que se registre, y de esta manera disminuye el impacto y el número de usuarios que quedarían sin el servicio de acueducto”, dijo el funcionario.
Señaló que otra de las acciones es la puesta en funcionamiento muy pronto del segundo tramo de la tubería de 5.2 kilómetros de longitud y 1.600 milímetros de diámetro instalada en la zona industrial de Mamonal desde hace varios años y que ha requerido una inversión de $36.000 millones, para distribuir agua potable desde la planta El Cerro hacia la zona suroccidental de Cartagena. “En caso de alguna emergencia en el acueducto, lograremos liberar la distribución que habitualmente hace la PTAP El Bosque hacia ese mencionado sector”, anota el gerente Barrera Medina.
Así mismo, Aguas de Cartagena tiene proyectado realizar otras obras civiles tendientes a mejorar el suministro del servicio con el reforzamiento de la tubería de impulsión Colinas, incorporando tecnología de última generación y repotenciando sectores hidráulicos en barrios donde se evidencian algunas deficiencias en el servicio como Lo Amador, San Pedro Mártir, Faldas de La Popa, María Cano, Bellavista, entre otros. Adicionalmente fue contratado un estudio especializado con tecnología de última generación para realizar un diagnóstico del sistema de conducción de agua.
Para el gerente general de Aguas de Cartagena, “estamos haciendo la tarea” porque la prioridad es el bienestar de la ciudad con un sistema de acueducto robusto que garantice la continuidad del servicio.
También explicó que las actuales redes de agua potable están renovadas y tienen una antigüedad de 27 años, mientras las tuberías de agua cruda son más antiguas, pero esto no es un indicador relevante para medir su vida útil. Aclaró que a las tuberías no se les realiza mantenimiento sino a las válvulas, accesorios, macromedidores, descargas y tanques y por eso el año pasado realizaron más de 8.000 actividades asociadas.
Los factores que sí impactan a la infraestructura del acueducto son los movimientos del terreno, asentamientos subnormales sobre las tuberías, especialmente en Nuevo Bosque y Cerros de Albornoz y otros efectos exógenos que generan desacoples de las tuberías.
Fue un acercamiento saludable con el periodismo local, en donde desmitifica versiones y rumores infundados que afloraron con ocasión de los daños registrados recientemente, impactando la imagen favorable que siempre ha logrado Acuacar.